12 de marzo de 2008

Como de costumbre, entró sin reparo, llegó desde un lugar desconocido y se postró frente al panel principal, con música de fondo y una sonrisa segura, inmediata, constante...

Le observo desde atras del gran ciprés, le veo caminar por el sendero sin luz, solo la poca luz de luna hace que su silueta se logre anunciar...

entra con la pala en la mano, buscando a la mujer en la habitación, muy exaltado tira cuanto hay en su camino, pretendiendo encontrala escondida de el, debajo de alguna madera...

no entiendo que hace con esa pala, ahora que estoy postrada en una cama de hospital construyendo mil imagénes que evocan esa escena, hace un mes... en mi casa de campo...

No hay comentarios: